Río Negro avanza en la exportación de petróleo con el oleoducto Vaca Muerta Oil Sur
La finalización de la soldadura del oleoducto Vaca Muerta Oil Sur representa un hito en la infraestructura energética de Argentina, permitiendo la futura exportación de petróleo desde la costa atlántica.
El gobierno de Río Negro celebró la finalización de la última soldadura automática del oleoducto Vaca Muerta Oil Sur (VMOS) en la Terminal Portuaria de Punta Colorada, un avance significativo en uno de los proyectos energéticos más importantes de Argentina en las últimas décadas. Este oleoducto, con una extensión de 437 kilómetros, conectará la localidad de Allen con Punta Colorada, facilitando la exportación de petróleo de Vaca Muerta a mercados internacionales a partir de 2026.
El gobernador Alberto Weretilneck calificó el evento como un 'día histórico para Río Negro y para la Argentina', subrayando que el éxito del proyecto se debe a la estabilidad política y económica de la provincia, así como a la seguridad jurídica que ofrece. Estas condiciones, afirmó, son fundamentales para fomentar la confianza y garantizar el cumplimiento de los compromisos entre el Estado y el sector privado.
El proyecto, liderado por la UTE Techint-Sacde, ha requerido un esfuerzo técnico y logístico considerable, incluyendo 76 cruces especiales de rutas y arroyos, el uso de más de 200 equipos pesados, y la participación de miles de trabajadores distribuidos a lo largo del trayecto. Durante octubre, las obras alcanzaron un récord de 175 uniones diarias y un avance de más de cuatro kilómetros en un solo día.
La etapa actual del proyecto, que culmina con la soldadura automática, será seguida por tareas de cierre lineal y el cruce subterráneo del río Negro, programado para diciembre de 2025. Si se cumplen los plazos, la exportación de crudo comenzará en diciembre de 2026, incrementando significativamente la capacidad exportadora del país. En su primera fase, el VMOS podrá despachar 180,000 barriles diarios, con un potencial de ampliación hasta 550,000 barriles.
Además del impacto económico, el proyecto ya ha comenzado a beneficiar a la región mediante el Bono VMOS de USD 60 millones, destinado a obras en salud, educación y seguridad. Weretilneck destacó la importancia de la colaboración entre el Estado, las empresas, los gremios y los trabajadores, afirmando que este esfuerzo conjunto es fundamental para el desarrollo sostenido de la región.
Con la mirada puesta en 2026, Río Negro se posiciona como un polo energético en expansión, buscando transformar su litoral atlántico en una plataforma estratégica para la exportación de petróleo neuquino. Este proyecto demuestra que la previsibilidad y la cooperación son esenciales para el crecimiento y el desarrollo productivo.