Controversia en Israel: Gobierno aprueba destitución de la Fiscal General Gali Baharav-Miara
El gobierno israelí ha aprobado la destitución de la Fiscal General Gali Baharav-Miara, una decisión que aún debe ser revisada judicialmente. La medida ha desatado protestas y críticas por considerarse un intento de consolidar el poder del primer ministro Netanyahu.
En un movimiento que ha generado intensas reacciones tanto dentro como fuera de Israel, el gobierno israelí aprobó por unanimidad la propuesta del ministro de Justicia, Yariv Levin, para destituir a la Fiscal General Gali Baharav-Miara. La decisión, sin embargo, aún está sujeta a revisión judicial, por lo que Baharav-Miara no ha sido oficialmente removida de su cargo. A pesar de ello, los ministros han decidido excluirla de futuras audiencias gubernamentales y reuniones de comités.
El ministro Levin argumentó que la decisión se tomó después de un largo proceso de intentos fallidos de cooperación con Baharav-Miara. La propuesta de destitución se produjo en medio de protestas masivas en apoyo a la fiscal general, que se llevaron a cabo tanto el lunes, frente a la reunión gubernamental, como el domingo en Tel Aviv.
La medida ha sido interpretada por la oposición como un intento del primer ministro Benjamin Netanyahu de fortalecer su control y debilitar el sistema judicial del país. El diputado Yair Golan, presidente de los demócratas, criticó al gobierno por centrarse en asuntos internos en lugar de abordar temas urgentes como la seguridad y la economía.
Baharav-Miara ha manifestado que su destitución es ilegal y motivada políticamente, y ha mantenido una postura crítica frente al gobierno de Netanyahu desde su formación. Entre los puntos de conflicto se encuentra la reforma judicial propuesta por el gobierno, que Baharav-Miara considera que debilita la independencia del sistema legal.
La disputa entre Netanyahu y Baharav-Miara no está directamente vinculada a la guerra en Gaza, aunque algunos críticos sugieren que el momento de la destitución busca desviar la atención de la situación bélica y de las presiones que enfrenta el primer ministro. La comunidad internacional sigue de cerca estos acontecimientos, preocupada por las implicaciones en la estabilidad política y judicial de Israel.